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31 medidas de Draghi y Letta que no conllevan inversión

► Muchas de las medidas del informe del ex primer ministro italiano que ha sacudido Europa no requieren más gasto. Y 29 de ellas son muy importantes para España

Draghi avisa de que la UE necesita un aumento "masivo" de inversión frente a la brecha con China y EEUU
Draghi avisa de que la UE necesita un aumento "masivo" de inversión frente a la brecha con China y EEUUEuropa Press

La competitividad europea siempre parece estar en entredicho. Atrapados entre las fuerzas tecnológicas y de innovación de Estados Unidos y Asia (aunque hace décadas Japón era el espejo en el que mirarse, ahora es China el objeto de comparación), son muchas las voces que se cuestionan el futuro y la viabilidad económica de la Unión Europea.

Por eso, la Comisión encargó los ya famosos informes Draghi y Letta, que han puesto sobre la mesa una serie de propuestas que los países deberían tomar para revitalizar la competitividad y productividad del bloque. Estos documentos estratégicos, presentados en 2024, han generado un intenso debate sobre el futuro económico de Europa.

Las malas noticias

El informe Draghi, titulado «The future of European competitiveness», destaca una realidad alarmante: la brecha económica entre la UE y Estados Unidos se ha ampliado significativamente, pasando del 15% en 2002 al 30% en 2023 en términos de PIB. Esta tendencia preocupante se atribuye a varios factores, incluyendo un menor dinamismo en el comercio de servicios y costes energéticos más elevados.

Ambos informes coinciden en la necesidad urgente de fortalecer el mercado único europeo en un contexto geopolítico cada vez más tensionado. Además, Draghi y Letta argumentan que la fragmentación del mercado y las barreras regulatorias están obstaculizando el crecimiento de las empresas europeas.

Entre las recomendaciones más destacadas por ambos documentos se encuentran el impulsar la innovación tecnológica y la digitalización; acelerar la transición hacia una economía verde; simplificar las normativas para facilitar el crecimiento empresarial; y promover la integración financiera en toda la UE.

Un punto crucial en ambos informes es el déficit de tamaño que sufre el tejido productivo europeo en comparación con sus competidores globales. Las empresas europeas tienen, en promedio, un tamaño menor y son menos dinámicas que sus contrapartes estadounidenses. Algo que, a ojo de estos expertos, limita su capacidad para aprovechar economías de escala y competir eficazmente en el mercado global.

El informe Draghi subraya que el entorno global actual es más exigente y menos propicio para el crecimiento europeo. La fragmentación del comercio internacional, la pérdida de Rusia como proveedor de energía barata y el aumento de los riesgos geopolíticos plantean nuevos desafíos para la economía europea.

Las buenas nuevas

Pero también hay una serie de lecturas más optimistas sobre los deberes que Europa tiene por delante tanto en su seno como en el panorama internacional.

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InnovaciónT. GallardoLa Razón

Hasta ahora, muchos de los análisis que se han efectuado sobre estos informes cargaban las tintas en la gran cantidad de dinero que sería necesario invertir para poner en marcha las 176 medidas que desgrana solo el informe Draghi. Y, sin embargo, según la visión del Instituto Elcano a petición de la Asociación de Consultoras de España (ACE), hay varias medidas que, siendo importantes (tanto para España como para el conjunto de la Unión), apenas conllevan un desembolso económico para llevarlas a cabo.

Así, 31 medidas (18%) son lo que han bautizado como Cheap Wins (no necesitan inversión y son muy importantes en su sector) y 29 medidas (16%) son Spanish Wins (muy importantes para España y tienen viabilidad política alta en nuestro país). Los Spanish Wins se concentran en el sector de la Digitalización (tanto en computación e Inteligencia Artificial, como en redes y semiconductores), materias primas y Política de Competencia. En las materias primas, destacan especialmente las medidas a tomar más allá de lo ya incluido en el CRMA (Ley de Materias Primas Fundamentales, por sus siglas en inglés).

Sectores clave para la economía española, como el automóvil y el transporte, destacan por su viabilidad media o baja aunque el Instituto Elcano asegura que sí se necesitará esfuerzo político para madurar estas ideas.

Es más, el 53% (94) de las medidas propuestas no necesita inversión pública adicional, porque bastaría con llevar a cabo algunos cambios regulatorios, coordinación entre actores o un rediseño de programas que ya están en marcha, por ejemplo, para llevarlas a buen término.

Dentro de las medidas muy importantes, el 46% (31) no necesita de ninguna inversión y serían Cheap Wins. Es decir, se pueden llevar a cabo avances significativos en la agenda de la competitividad europea sin necesidad de movilizar dinero fresco.

Pero esto no debe contribuir a ignorar que una parte muy relevante de la hoja de ruta marcada por Draghi depende de inversiones nuevas: un 13% (22) de las propuestas. Los Cheap Wins más destacados son propuestas horizontales, y la mayoría (ocho de trece) tiene valoraciones de viabilidad política altas, por lo que, según estos expertos, hay que saber aprovecharlas como palanca de competitividad.

Los Dear Wins se concentran en sectores con un carácter intensivo en infraestructuras y con importantes retos de descarbonización y de desarrollo de tecnología.

Por todo ello, y teniendo en cuenta que la digitalización y la innovación son denominadores comunes de estas medidas, la ACE reclama que estos informes no caigan en saco roto y se tomen en serio las medidas para no perdeer el tren de la competitividad europea a nivel internacional, sacando partido de estos vientos a favor que soplan para la puesta en marcha y ejecución de algunos de estos puntos.

[[H2:Una obsesión «errónea»]]

Sin embargo, en la presentación de este análisis, también se planteaó si se está poniendo el foco de forma errónea. «Nos estamos obsesionando de manera errónea con la competitividad europea». Judith Arnal, Consejera de Banco de España y miembro de su Comisión de Auditoría e Investigadora senior asociada del Real Instituto Elcano, defiende que el concepto de competitividad es «altamente manipulable y para un político es interesante para adaptarlo a su narrativa». Por eso, ella utiliza la productividad, la diferencia en que se usan las tecnologías en los procesos productivos de cada país.

«Se habla mucho de los problemas de regulación, pero hay pruebas de que cuando las empresas de EE UU se implantan en Europa, y se tienen que acoger a estas mismas normativas, siguen siendo más productivas que las europeas», cuestionaba.

Tras repasar varias métricas, concluye que los países que está más elevados son siempre los mismos. «Debe haber un análisis de cada estado miembro con hoja de ruta nacional sobre cómo puede mejora. No es necesario mirar al otro lado del atlántico», sentenciaba.

Claves

Tanto el Informe Draghi como el Letta señalan la necesidad «urgente» de fortalecer el mercado único europeo.

Las medidas relativas a digitalización, materias primas y competencia son las más importantes para España.

Una de las más factible para España consistiría en la ampliación del Barcelona SuperComputing Center (BSC).

12 de las medidas importantes para España son «baratas» y compartidas con la UE, por lo que podríamos tener un papel importante en ellas.

Combinar las necesidades particulares de cada país con las globales de la UE, uno de los principales escollos.

Las pymes son las principales perjudicadas de la gran burocracia europea.

La mitad de las propuestas planteadas requieren de inversión pública para que puedan materializarse.