El gobernador del Banco de España, José Luis Escrivá, se ha comprometido en la ceremonia de su toma de posesión a ejercer el cargo "con humildad" y ha encargado al consejero propuesto por el PP, Fernando Fernández, ideas para "reforzar la independencia" de la institución con un nuevo grupo de trabajo. Sin embargo, éste ha terminado rechazando el encargo por sorpresa en la tarde de este miércoles en la reunión del Consejo de Gobierno. Fuentes conocedoras aseguran que Fernández exigía plena autonomía en el encargo e ir más allá ampliando el grupo de trabajo a un rediseño de la arquitectura financiera en España. También discrepaba del plazo, porque Escrivá pretendía que fuera rápido.
Finalmente, se ocupará de esta tarea la nueva consejera ejecutiva Lucía Rodríguez, considerada próxima al ministro de Economía, Carlos Cuerpo.
Todo ha sucedido tras la ceremonia de toma de posesión. en ella, según ha afirmado Escrivá, su compromiso es que "sigamos avanzando en que el Banco de España sea una entidad respetada, confiable, imparcial y comprometida con el bienestar de nuestra sociedad".
Escrivá no ha aludido a su recientísimo pasado como ministro del actual Gobierno, pero ha asegurado que hay que "revisitar" aspectos de la Ley de Autonomía del Banco de España de 1994 para "reforzar la independencia" de la institución. Ha asegurado que crea ya "un grupo de trabajo" para hacer propuestas al Gobierno de modificación de la norma. Y, según fuentes autorizadas, lo iba a dirigir Fernández, el consejero que le ha votado en contra a su primera reorganización directiva. Por tanto, su rechazo repentino al encargo que había aceptado previamente, según fuentes oficiales del Banco, supone un nuevo choque entre ambos.
El gobernador ha roto por otra parte la tradición, como publicó este diario, y no ha permitido que intervengan ministros en una toma de posesión en el Banco de España. Todo su esfuerzo en el acto ha sido presentarse como un alto funcionario autónomo del Gobierno del que ha formado parte. Sin embargo, ha omitido mensajes tradicionales del supervisor sobre la necesidad de realizar ajustes creíbles para cumplir el déficit. Tampoco ha mostrado preocupación por la actual falta de Presupuestos.
Ha concluido su intervención recalcando la importancia de la "humildad" al ser "un valor que nos permite reconocer nuestras limitaciones y aprender de nuestros errores".
El anterior gobernador Pablo Hernández de Cos, ha recibido un largo aplauso de los invitados tras un breve discurso. Ha evitado criticar el proceso de su sucesión pero sí ha lanzado este mensaje: "Manteniendo el rigor y la independencia, el éxito del Banco de España está asegurado". Escriva ha elogiado su labor cuando ha intervenido posteriormente.
Al acto han acudido, entre otros, la presidenta del Banco Santander, Ana Botín, de BBVA, Carlos Torres y de Sabadell, Josep Oliu. Estos últimos se han saludado con cordialidad en pleno proceso de OPA hostil. El presidennte de CaixaBank, José Ignacio Goirigolzarri, de Abanca, Juan Carlos Escotet, o de la Asociación Española de Banca, Alejandra Kindelán, han acudido también al igual que el director general de la Confederación Española de Cajas de Ahorros (CECA), José María Méndez. Antiguos gobernadores como Miguel Ángel Fernández Ordóñez han asistido igualmente.